viernes. 26.04.2024

Justicia para el niño torero

El cambio social al que asistimos debe marcarse como prioridad la formación y la información para un buen uso de los Medios Sociales

Justicia para el niño torero

El cambio social al que asistimos debe marcarse como prioridad la formación y la información para un buen uso de los Medios Sociales

 Tribuna libre de Roxana Sáez 

Los medios de comunicación se hacían ayer eco de una gran noticia como es la detención por la Guardia Civil de las dos personas que injuriaron en Internet al pequeño Adrián, enfermo de cáncer, simplemente porque había cumplido su sueño de ser por unos minutos torero durante un festival organizado para recaudar fondos en la lucha contra la enfermedad.

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Muchas veces he hablado en mi blog sobre comunicación y docencia de los riesgos  que conlleva hacer un mal uso de las redes sociales, peligros que se acentúan cuando se utilizan con tanta malicia. Afortunadamente, en el caso de Adrián, esa ira provocada por un comentario ofensivo tuvo también, en su momento, su respuesta viral, una contestación que debe servir para aplicar, con la mayor contundencia, las medidas previstas ya en la última reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal contra las injurias y calumnias en la Red.

Como en la vida misma ha sido cuestión de tiempo que la Guardia Civil, que desde entonces no ha dejado de investigar, haya conseguido detener a dos individuos  que pensaban que podían decir lo que les diera la gana en Internet. Ese es precisamente el principal riesgo que tiene hacer un mal uso de los Medios Sociales. Esa rapidez con la que se le puede dar a publicar, sin pensar en sus consecuencias, es un arma de doble filo pues, también como ocurre en la vida misma, antes de hacer las cosas hay que pensarlas dos veces y contar hasta tres antes de publicarlas. No hay duda y, soy defensora de ello, que las redes sociales ofrecen más oportunidades que desventajas pero, también, es cierto que estamos en un momento de absoluto desconocimiento sobre el uso que se puede hacer de ellas.

El manejo intuitivo de las mismas por falta de formación está haciendo que éstas se conviertan para muchos en una auténtica pesadilla. Esta misma semana leía otra noticia desoladora para las redes sociales, el padre que ha utilizado a su hija para cometer una estafa a través de la Red, recaudando miles de millones para su curación aprovechándose de la solidaridad que despierta también Internet. Las estafas se multiplican por días en los Medios Sociales debido a una legislación que no es capaz de avanzar a la velocidad que lo hacen las Nuevas Tecnologías.

De ser una de las herramientas más potentes ahora mismo del marketing online a ser también uno de los mayores peligros para los usuarios de las mismas. Hace unos días tengo que reconocer que estuve a punto de caer en una estafa que gracias a la labor de la Policía Nacional pudo ser descubierta. El sorteo de tres vehículos de alta gama de una conocidísima marca de coches para lo que se había creado una página web falsa con la que recabar datos de forma masiva. Me resulto tan extraño, pero a la vez era tan novedoso sortear un producto de tanto valor, que decidí vichear por Internet antes de dejar mis datos. Y ahí fue donde me encontré la sorpresa…todo era mentira.

La revolución digital es un hecho y ha llegado para quedarse y eso obliga a activar una formación adaptada al cambio social debiendo ser una de las prioridades en el sistema educativo español y en las administraciones competentes.  No basta con talleres y charlas dirigidos a grupos determinados, es necesario una formación global en un mundo globalizado.

Por fin se empieza a hablar en nuestro país de la transformación digital y por fin pisamos el acelerador en un tema que es vital para la creación de empleo pues no hay que olvidar que el sector TIC está generando puestos de trabajo mientras desaparecen muchos oficios tradicionales. Y terminando con el pequeño Adrián dar las gracias a la Guardia Civil por su magnifica labor en este y otros muchos casos. Esperemos que ahora se haga justicia.

Justicia para el niño torero