“Todos estamos capacitados para ser unos excelentes comunicadores”

El periodista y experto en Comunicación Eugenio Camacho participa en el ciclo ‘Diálogos en Álvaro Domecq’

Eugenio Camacho López de Carrizosa es -por vocación y por deontología profesional- un periodista dado a la comunicación. La comunicación como vehículo periodístico y la comunicación como excelente sustantivación de la oratoria. Comunicación como capacidad que conduce -en clara derechura- al éxito sin paliativos. Comunicación como eje central sobre el que giran las relaciones personales, interpersonales e intrapersonales.

Eugenio Camacho elimina de sopetón el miedo -el pánico bloqueador- y la inseguridad (aparente) de todos cuantos sientan la incapacidad de hablar en público con eficacia, con soltura, con impactante espontaneidad/naturalidad. Ha participado en el ciclo ‘Diálogos en Bodegas Álvaro Domecq’ coincidiendo con el lanzamiento del  ‘Curso de Oratoria y Comunicación eficaz’ que su propia marca –‘Eugenio Camacho Media Coach & Comunicador’- coorganiza con MAV-Comunicación (Agencia de Comunicación y Gestión Cultural). He aquí sus opiniones y siempre atinadas aseveraciones…

¿Por qué existen tantas personas autocastigadas -o mermadas tozudamente, obsesionadas a la postre- en su supuesta incapacidad o nulidad para expresarse correcta y eficazmente en público? ¿Acaso no todos estamos capacitados y programados para hacerlo?

Sencillamente, porque nadie nos ha dicho que podíamos hacerlo. En el colegio no nos sacaban a hablar en público. Tampoco en el instituto ni en los ciclos formativos. Por increíble que parezca, en la universidad no era ni es costumbre. Y claro, al adentrarnos en el terreno profesional lo hicimos con una gran limitación. Esto se tradujo posiblemente en entrevistas de trabajo en las que no dimos la talla porque no nos mostramos seguros y confiados y fuimos incapaces de proyectar todo nuestro potencial y valía.

Es muy posible que en las ocasiones en las que hemos tenido que hablar en público, hayamos sufrido los síntomas clásicos: un nudo en el estómago, sequedad en la boca, rubor, sudor y hasta temblores. La falta de costumbre ha hecho que el sentido del ridículo y el miedo escénico se hayan apoderado de nosotros. Sin embargo, nunca es tarde para recibir la metodología adecuada y acabar con esta carencia que muy posiblemente nos haya privado de muchas oportunidades.

Todos estamos capacitados para ser unos excelentes comunicadores. Será suficiente una buena metodología y entrenamiento para descubrir al buen orador que llevamos dentro.

¿Se pueden adquirir las herramientas para vencer el miedo escénico?

Por supuesto. Hay quien piensa que el miedo escénico es natural. Y además que es inevitable y hasta conveniente. Nada de eso es cierto. Si en España tres de cada cuatro personas tienen miedo escénico es lógico pensar que es algo innato. Sin embargo, ese porcentaje es muy inferior en Estados Unidos, Canadá, Argentina o Italia, países donde se imparte Oratoria en los colegios, institutos y universidades.

Un curso de Hablar en Público ya confiere una confianza y seguridad importantes, pero la práctica a base de entrenamiento y el hábito de prepararse las intervenciones jugarán también un papel importante. En el caso de la metodología que imparto, incluye una parte que aprendí del profesor Lafuente y que se basa en el refuerzo de la personalidad.

¿Comunicación eficaz es sinónimo de éxito personal?

Absolutamente. Me gusta hablar de un banco con tres patas. Sin alguna de las tres el banco cedería. La primera es conocimiento, la segunda honradez y la tercera una buena comunicación.

El tener presente las tres conduce con seguridad al éxito profesional y personal. Hasta ahora habíamos prescindido de la comunicación y no nos había ido mal del todo, pero el potencial que adquirimos con esta cualidad es sorprendente.

¿Por qué a menudo creemos que la oratoria sólo es aplicable a los discursos ante concurridos auditorios y no asimismo a la optimización del uso de la palabra en una reunión familiar o en una trascendental negociación empresarial?

Es que al Orador lo hemos visto hasta ahora como a un ser privilegiado. Una persona superior a la que admirábamos y muy alejada de nuestras posibilidades. Con unas cualidades innatas que le convertían en un excelente comunicador.

Vamos, como si la Oratoria fuera un don para unos cuantos afortunados. Pero de eso nada. La oratoria es para todos. Independientemente de nuestra cultura, de nuestra posición social y de nuestra formación. Todos estamos programados para comunicar de manera sobresaliente. Repito, todos.

¿En qué consiste el curso de oratoria promovido por Eugenio Camacho Media Coach & Comunicador y MAV-Comunicación?

Ese curso consta de tres niveles. El nivel 1, de cuatro horas, desmonta algunos mitos con respecto a la Oratoria que nos va a permitir tratarla de tú a tú. Eso nos hará más receptivos a la hora de adquirir los conocimientos necesarios para dar esquinazo al miedo escénico e ir mejorando paulatinamente nuestra forma de comunicar. Posteriormente hay dos niveles, de tres horas cada uno, en los que ponemos en práctica la metodología.

Cómo preparar y ejecutar una presentación o discurso, atender a los medios de comunicación o las claves para una buena negociación son algunos de los trabajos en los que insistimos. Estos talleres nos permitirán conocer con precisión nuestro nivel de comunicación, el margen de mejora que tenemos y adquirir la soltura suficiente para mejorar mi productividad profesional gracias a la comunicación.

¿A quién o quiénes va dirigido?

A todo tipo de personas. A licenciados, catedráticos y directivos, a estudiantes, recién titulados, personas sin estudios ni formación, amas de casa, desempleados… Todos tenemos mucho que ganar al adquirir la capacidad de hablar y de convencer a los demás.

¿Qué desearía añadir al respecto de la vigencia y necesidad de los cursos de oratoria en nuestra sociedad actual?

Que la forma de trabajar y de relacionarnos ha evolucionado vertiginosamente, y más que lo va a hacer. Que la competencia es feroz y que es una temeridad ir por la vida sin esta cualidad cada vez más necesaria: la de hablar con eficacia. Que nos arrebataron esta herramienta un sistema educativo que, incomprensiblemente, sigue sin atender esta necesidad vital para la sociedad, pero que nunca es tarde para adquirirla. Cuanto antes lo hagamos, mucho mejor para nosotros. Y a los solteros, decirles que este curso sirve también para ligar más (risas).