jueves. 25.04.2024

“OT no me dio un espaldarazo"

Pablo López se confiesa a Bertín Osborne en un programa excepcional

Todo un exitazo de naturalidad, de transparencia personal, de sencillez. La intervención de Pablo López en la última emisión del programa ‘Mi casa es la tuya’ de  Bertín Osborne mostró a las claras a un joven compositor que nada esconde, derrochador de empatía, vocacional hacia su profesión, profesional hacia su vocación.

Se retrató a sí mismo sin tapujos y sin altanería. En su hogar segoviano de Peñarrubias de Pirón. Un domicilio alejado del mundanal ruido y perdido en medio de la nada. Bertín enseguida se sintió identificado con el talante y con el talento del entrevistado. Tan risueño, tan bromista, tan feliz con sus circunstancias vitales.

Habló Pablo López de su infancia de veras complicada. De cómo Operación Triunfo, el programa mediático, intervino en su carrera profesional. O en el despegue o no despegue de su carrera profesional. «OT no me dio un espaldarazo. Sí me ofreció un simulacro de lo que puede ser la fama y el éxito. De OT me llevé ciertas claves. Había que ser fiel  a sí mismo. Analizarte a ti mismo, que es lo importante».

Después de OT montó un bar, 'El 47', “que es un número que me gusta y que me persigue. Pero qué ruina de negocio, Bertín. Lo pasamos muy bien porque lo montamos mi hermano y yo para tocar música. Pero tocamos fondo porque empezamos a deber mucho dinero. A los bancos, a los proveedores. Y me dije que no, que aquello había que abandonarlo y que debía encerrarme a escribir canciones como un condenado, que era lo mío”.

A Pablo López le favoreció el programa de Bertín. Por si algún telespectador no conocía del todo su manera de ser. Le convino. Bertín preguntó: “¿Sigues soltero o no? Porque la última vez me dijiste que eras un alma libre”. Pablo responde: “He estado con una persona once años. No hay culpa ni rencores. La gente que está a nuestro lado es muy valiente. Pero hay un exceso de sobreinformación. Cuando nosotros, los artistas, compartimos nuestra vida al cien por cien con otra, tenemos miedo a tomar ciertas decisiones no ya por nosotros sino por la persona que nos acompaña”.

A la pregunta de cuántas veces lo habían confundido con Pablo Alborán, el invitado responde sin pensárselo: “10.000 a 12.000 veces”. Sobre la profesión, su profesión, añade: “me ha regalado a Pablo, a Antonio, a David, a Alejandro”.

Precisamente dos de sus mejores amigos, y nunca jamás competencia, Antonio Orozco y David Bustamante, junto a su madre Lola y su hermano Luis, fueron también participantes de un programa excepcional, fresco, espontáneo, auténtico. Bertín, Pablo, Antonio y David cierran el espacio, acompañados al piano, cantando temas memorables.

“OT no me dio un espaldarazo"