El Guadalete como fuente de riqueza y empleo
Desde la Unión General de Trabajadores de la comarca de Jerez ven necesario invertir y recuperar el río Guadalete
Mucho se ha dicho de la necesidad de recuperar el río Guadalete y su entorno para conservar sus valores ambientales, patrimoniales, culturales y lúdicos. La preservación de cualquiera de estos aspectos, por si solo, merecería el esfuerzo que supone mantener en condiciones optimas este ecosistema. Pero, en época de vacas flacas, la cuestión que desgraciadamente prima sobre las demás es la económica. Y es por este motivo por el que se hace más necesario que nunca invertir en nuestro río.
De él se obtiene el agua que riega su vega y el triangulo Sanlúcar–Rota–Chipiona. De la calidad del agua depende, en buena medida, la calidad de los productos agrícolas que han de competir en unos mercados cada vez más exigentes.
De la cantidad y calidad del agua que desemboque en el mar depende también la calidad del agua de las playas de la bahía, algo tan importante para el primer sector económico del país, el turismo. La misma importancia tiene para la pesca, ya que el tramo bajo del río y su desembocadura es hábitat o zona de alevinaje para muchas especies de gran valor comercial.
Por todo ello invertir en depurar las aguas que se vierten al río supone garantizar la supervivencia de todas estas actividades económicas. En los últimos meses ha trascendido la inversión que, dentro de los fondos ITI, tiene previsto realizar la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en la conservación y uso público del Guadalete. La principal actuación será la creación de un sendero fluvial que una El Puerto de Santa María con Jerez.
Existen en la provincia ejemplos de inversión en espacios naturales y en senderos que han tenido una importante repercusión en la economía local. La Vía Verde de la Sierra atrae todos los años a miles de personas que visitan, pernoctan, comen, compran, etc. en los pueblos del trazado. Un ejemplo más cercano lo encontramos en Los Toruños que se ha convertido en lugar de esparcimiento para los habitantes del entorno.
El sendero del Guadalete puede ser un revulsivo para la economía local, especialmente para las barriadas rurales que se encuentran en sus riberas. Este espacio permitirá la práctica de actividades deportivas, turísticas, lúdicas y educativas en un entorno de alto valor natural, paisajístico, histórico, cultural y patrimonial.
Este sendero no puede limitarse a una vereda. Debe reunir las condiciones necesarias para compatibilizar el uso a pié, en bicicleta o a caballo, sin que se produzcan molestias entre las distintas actividades y contar con la infraestructura para cubrir las necesidades de los usuarios. Así mismo debe discurrir por un entorno en el que se hayan eliminado los impactos actualmente existentes y se haya procedido a una restauración ambiental y paisajística.
Es necesario que se den los pasos legales necesarios para la declaración del Guadalete como río navegable y se cree la infraestructura necesaria para poder permitirlo. La navegación en piraguas, canoas, o en embarcaciones adaptadas, genera un número considerable de empleos en otras zonas de España. Navegar por el Guadalete, mientras se contempla edificios históricos como la Cartuja, el Puente del mismo nombre o el Molino de mareas, se observa la gran diversidad de fauna que alberga el río y las marismas o se conoce su rica historia, sería un atractivo de primer orden que vendría a diversificar la oferta turística de nuestra provincia
Solo la elaboración y ejecución de los proyectos necesarios para convertir en realidad estas históricas demandas sociales, así como el mantenimiento de los mismos, generará un número considerable de empleos. En definitiva se trata de volver a convertir a nuestro río en lo que siempre fue, fuente de riqueza sostenible y bienestar.
