Al jerezano Padilla le reconocen la Puerta del Príncipe
Actuaciones de Ginés Marín y de la Escuela de Ubrique, con entrega de trofeos en Sevilla, Madrid y Ávila
El 13 de noviembre el torero jerezano-oliventino Ginés Marín debutó como matador en la plaza de Lima (Perú), en el tercer festejo de la Feria del Señor de los Milagros, ante toros de Camponuevo, justos de presentación y con poco juego, desarrollando algunos complicaciones. En su primero estuvo con ganas, mostrándose variado en el capote, por verónicas, chicuelinas y quite por saltilleras con revolera invertida, pero en la muleta el animal se desfondó enseguida, obligando a una faena de exposición y decisión para robar unos pocos muletazos, sin llegar a calar en el público, que quedó en silencio. En su segundo, descastado y peligroso, que embistió feamente en el capote, Marín, tras inicio de faena por ayudados, expuso pero el toro se defendió y nunca rompió; la insistencia y voluntad, incluyendo un sincero arrimón y una gran estocada, consiguieron del público aplausos. Los otros anunciados fueron Juan Bautista, que se quedó en dos silencios, y Daniel Luque, que vio silencio y en su segundo fue cogido, con rotura de peroné.
Ginés Marín en Lima
El 13 de noviembre se celebró el fin de curso de la Escuela Taurina Comarcal de Ubrique, con gran afluencia de público. Participaron los alumnos y aficionados prácticos que han estado inscritos durante el presente año en la escuela. Todos pudieron ponerse delante de las reses de Salvador Gavira García y de Juan José Trujillo. En el fin de curso se entregaron diplomas de asistencias al mismo, tanto a los alumnos como ha aficionados prácticos. A la entrega de diplomas asistió el concejal de Cultura de Ubrique, José Manuel Fernández. La Escuela Taurina de Ubrique ha cerrado el curso con veinticinco alumnos inscritos, habiendo realizado una gran promoción de fomento de la Fiesta en toda la comarca de la sierra de Cádiz, y es primera que, en un curso,ha integrado a aficionados prácticos con los propios alumnos.
Escuela de Ubrique
Días pasados, en Sevilla, concretamente en el Real Alcázar, ha tenido lugar el acto de entrega de los "Premios del Festival de las Naciones”, que van por la XXIII edición. Fue presidido por el alcalde de la ciudad y contó con la presencia del delegado del Gobierno en Andalucía, el jerezano Antonio Sanz, y de los embajadores de Filipinas y de El Salvador.
El Festival de Las Naciones ha querido reconocer la importancia de la cultura del mundo del toro tanto a nivel social como tradición y reclamo turístico. Así, se han entregado premios a Juan José Padilla, triunfador de la Feria de Abril con salida por la Puerta del Príncipe en la Plaza de Toros de la Maestranza el pasado 16 abril 2016; la Fundación del Toro de Lidia (representada por Carlos Núñez), en reconocimiento y apoyo a la labor de defensa y conservación del toro de lidia y la tauromaquia como disciplina artística, premio entregado por Álvaro Domecq; a los Hermanos Peralta, ilustres sevillanos considerados los más grandes en el arte del rejoneo, y a Rafael Serna, en representación de las nuevas generaciones de novilleros que garantizan la continuidad y el mantenimiento del legado cultural que supone la Fiesta de los toros en una época especialmente complicada. También se han entregado otros premios, de carácter no taurino, en los grupos "Premios Solidarios”, "Premios ciudad de Sevilla” y "Embajadores de la ciudad”. El Festival de las Naciones celebró su primera edición en 1993 en el Casino de la Exposición de Sevilla, continuando con el legado y el espíritu de la Expo Universal del 92.
El 12 de noviembre el salón de plenos del ayuntamiento de El Álamo (Madrid) fue el escenario donde ayer tarde se entregaron los premios de la feria taurina de la localidad y allí Octavio Chacón, el torero de Prado del Rey, recogió el premio a la Mejor Faena de la corrida concurso de ganaderías celebrada el 4 de septiembre, premio concedido por la Asociación Cultural Taurina. Entonces se enfrentó al toro de Dolores Aguirre, que, además, ha sido premiado como Mejor Toro del concurso, con premio concedido por el Ayuntamiento de El Álamo. Otros premios que se entregaron fueron al Mejor Puyazo y al Mejor Par de banderillas. También se entregaron placas conmemorativas a mayorales y a la labor de difusión de la Fiesta.
En Sotillo de la Adrada (Ávila) se han concedido los premios de su temporada taurina, compuesta por una corrida de toros y dos novilladas. El linense Miguel Ángel Pacheco ha sido declarado Mejor Novillero. Entre otros premios, el matador y Triunfador de la Feria ha sido Manuel Jesús el Cid. Por cierto, el Mejor Picador ha sido Isidoro Rubio, picador de la cuadrilla del también gaditano Octavio Chacón. Fernando Peña, Curro Robles y Rafael González se han llevado los premios de Mejor Ganadería, Mejor Par de banderillas y Mejor Brega. La entrega de los premios será el día 25 de Noviembre y con motivo de ella habrá una cena coloquio con los premiados, organizada por la Asociación Cultural Taurina Coso de El Teso, como todos los años.
En una ocasión anterior hemos citado la sentencia del Tribunal Constitucional que ha anulado la ley catalana que prohibía los toros en Cataluña. Pues bien, esta noticia judicial no viene sola ya que también en este mes de noviembre un juzgado de San Sebastián ha dejado definitivamente sin efecto la prohibición de celebrar corridas de toros en la plaza municipal de Illumbe, decretada en 2013 por el anterior gobierno local de Bildu en la capital guipuzcoana, al entender que esta decisión no fue ajustada a derecho. La sentencia aclara que la Ley para la Regulación de la Tauromaquia cita el deber de protección de la tauromaquia en su condición de patrimonio cultural por parte de los poderes públicos que deberán garantizar su conservación, al tiempo que recuerda que se trata de una expresión relevante de la cultura tradicional del pueblo español. La sentencia concluye que las corridas de toros no pueden tildarse de eventos, actos o actividades prohibidos, pues ello excede la discrecionalidad municipal; además, las instalaciones de una plaza de toros no pueden desnaturalizarse respecto del desarrollo de actividades lícitas.
Antes de finalizar queremos rectificar la información dada en nuestra anterior crónica, respecto a Celso Ortega. Naturalmente, falleció el 11 de noviembre, no de septiembre, como se decía allí. Además, su padre es César, no Celso.
