Crían a un burro como un caballo de doma jerezano

Caramelo nació hace 12 años y ofrece espectáculos por España y el extranjero gracias a su alta capacidad de aprendizaje

Puede parecer mentira pero no lo es. Desde hace varios años, Carlos Román comenzó a trabajar junto a su asno 'Caramelo' en el aprendizaje de la doma clásica. Según recoge el diario económico Expansión, el joven jinete se propuso un reto consigo mismo a pesar de los múltiples factores en contra con los que ha tenido que lidiar. Ahora, ambos disfrutan y hacen disfrutar con sus saludos, piruetas, trotes y galopes.

Carlos Román, 29 años, ensaya con "Caramelo" ejercicios de doma. Luis de las Alas (Expansión)

El sevillano, en palabras recogidas por el diario, afirma que "nada más verme se viene conmigo y hace lo que yo quiera, cualquier ejercicio. Y no le doy azúcar ni recompensas en forma de comida porque darle de comer en la mano no me gusta y tira bocaos. Es tan bueno que se conforma con unas caricias".

Sus apariciones en televisión y algunos espectáculos por el extranjero le han permitido mantener económicamente a un animal por el que ha llegado a recibir hasta 25.000 euros y algún que otro cheque en blanco.

El animal nació en el municipio de El Coronil hace 12 años y a través de un amigo en común llegó a las manos de Carlos Román con apenas 30 meses de vida. El propietario explica que"yo le montaba un caballo a un amigo de mi padre, se lo domaba, pero no le cobraba nada por amistad con la familia. Un día, en el campo donde tenía el caballo, vi que tenía un burro en un corral, y me llamó mucho la atención el color del pelo. Y le dije: 'Miguel, véndeme este burro'. Y me lo dio".

El futuro de la familia de Caramelo parece garantizado, una vez que su hijo 'Bombón' y su nieto 'Sugus', comienzan a adquirir las dotes de doma que han catapultado a la fama al primer burro criado en la alta escuela del arte ecuestre.

Tanto es así que Mariano Herrera, estudioso del comportamiento de los asnos y profesor de Etología de la Universidad de Córdoba, explica que "el burro tiene una capacidad de aprendizaje tremenda, inusitada. Dentro de la especie equina es mucho más inteligente que el caballo. Al caballo se le da un premio o recompensa y con él haces lo que quieras. En el burro ni siquiera hace falta. Y eso que es un perfecto conservador de su anatomía, y por eso jamás se expondrá a peligros o daños para sí mismo. Si dice que no vadea un río no lo vadea, o que no camina por un risco no lo hará bajo ningún concepto porque presiente que peligra su vida".